Es el momento de ponerse en marcha
¿Eres de los que cree que los dichos populares son pura sabiduría o piensas que son frases carentes de razón solo aptas para los demasiado crédulos? Pues en este artículo no vamos a confirmarlo ni desmentirlo. Es más, ni siquiera vamos a cuestionárnoslo, pero hay uno en el refranero que nos viene que ni al pelo para comenzar nuestro paseo por el mundo de la oruga procesionaria: “Más vale prevenir que curar”.
¿Y a qué viene esto? Te preguntarás. Pues porque, aunque la época en la que la procesionaria está de moda es la primavera, cuando los nidos blancos tiñen los pinares y las orugas pasean sus “pelillos” urticantes por doquier, el mejor momento para atajar todos los problemas que estos insectos traen tanto en zonas rurales como urbanas es ahora (en otoño).
Vamos a conocer un poco más sobre la procesionaria
La procesionaria pertenece a la familia de las mariposas (lepidópteros). En su fase de oruga son muy reconocibles por la abundante pilosidad que llevan en el dorso de su cuerpo. Estos pelos son su sistema de defensa contra sus depredadores y a la vez uno de los orígenes de los desvelos que nos causan a los humanos. Cada oruga puede portar más de 1.000 pelos cada uno de los cuales contiene una sustancia denominada thaumatopina. Esta toxina causa sensación de picazón y puede llegar a provocar verdaderas reacciones alérgicas a quien tenga contacto con ella. Y tener contacto con estos pelos no depende solo que se toque una oruga porque se desprenden con facilidad y vuelan.
El color de las orugas es verdoso y se va oscureciendo en la medida en que van creciendo en su camino hacia su estadio adulto de mariposa.
Por qué es importante conocer su ciclo biológico para solucionar esta plaga
Conocer el ciclo biológico de esta plaga es fundamental para entender por qué el otoño es un momento clave para tratarla.
Cuando en verano las orugas se han convertido en mariposas es el momento de reproducirse. Cada ejemplar deposita hasta 2.000 huevos en las copas de los árboles, huevos de los que más tarde saldrán las pequeñas oruguitas, que en su tercera fase larvaria formarán las típicas bolsas blancas tan características en las que se refugian en invierno.
En primavera los animales rompen el nido y salen en “procesión” para buscar un sitio en el suelo donde poder enterrarse y formar la crisálida.
¿Qué tratamientos utiliza Rentokil contra la procesionaria?
No hay un solo tratamiento contra la procesionaria. Desde Rentokil los más utilizados son los biocidas, el tratamiento de endoterapia y las trampas con feromonas.
El tratamiento ideal para esta épica es la endoterapia. Consiste en la aplicación de un producto insecticida en el tronco del árbol que la planta va absorbiendo e incorpora a sus hojas, futuro alimento de los ejemplares que saldrán en primavera. Una vacuna contra tus peores pesadillas primaverales.
Algunos datos curiosos sobre procesionarias:
- Las mariposas hembra son capaces de distinguir los tipos de pino sólo por la vista y el olfato, para así decidir dónde poner sus huevos.
- Pueden llegar a encontrarse hasta 2.000 huevos en el mismo árbol, que al eclosionar darán lugar a otras tantas orugas.
- Cada oruga tiene alrededor de 1.000 pelos, lo que puede dar lugar a nubes de pelos que pueden provocar alergias e incluso asma.
No dejes que la procesionaria invada tu entorno. Si tu jardín está infestado de esta plaga no esperes a que su potencial peligro se vuelva una realidad para tu familia o tus clientes. Es el momento de consultar con nuestros expertos y prevenir en vez de curar. En Rentokil somos expertos en plagas. Avísanos y haremos una inspección gratuita para valorar tu caso.
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