El Real Decreto 3/2023, por el que se establecen los criterios técnico-sanitarios de la calidad del agua de consumo, su control y suministro, obliga a realizar limpiezas y desinfección de los depósitos, conducciones y redes de distribución antes de su conexión a la red general.
Al finalizar las obras, es normal que en el interior de las tuberías encontremos suciedad, lodos, elementos orgánicos, que pueden ser un posible foco de infección.
El objetivo del tratamiento es, por un lado, realizar la desinfección para evitar la entrada de organismos patógenos a la red general de abastecimiento de agua y, por otro, la limpieza de depósitos, tuberías... de restos inorgánicos que pueden ensuciar las tuberías.
De esta forma aseguramos que las nuevas conexiones de las redes de distribución se encuentren en perfecto estado y no influya en la calidad del agua de consumo.