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Las termitas son unos pequeños insectos que pertenecen al orden de los isópteros y que, al igual que las hormigas, son extremadamente sociales y no pueden resistir al gusto por alimentarse de la madera y la celulosa.
Existen más de 2.000 especies en el mundo y viven en colonias numerosas, que pueden llegar hasta 2 millones de individuos. En cada colonia la única que pone huevos es la reina.
Lamentablemente, no hay que dejarse llevar por su aspecto inofensivo pues el insecto tiene una gran capacidad de destrucción; por ejemplo, en Tenerife se estarán destinando 10 millones de euros para erradicar a la termita americana en más de una década.
Sin embargo, ¿por qué las termitas aladas son un indicativo de un riesgo mayor? Veamos.
Si observamos termitas con alas alrededor de la propiedad, eso significa que hay un riesgo potencial de que exista una plaga o, peor aún, ya tenemos un problema de plaga de termitas que ha pasado desapercibido durante un buen tiempo.
Las termitas subterráneas generalmente eligen la primavera , gerneralmente entre Agosto y Octubre, para salir de la colonia y aparearse, creando un efecto visual similar al de humo saliendo del suelo.
En el vuelo nupcial, las termitas pierden sus alas (por lo general, veremos aglomeraciones de alas caídas en el suelo) y empezarán a buscar un lugar para hacer un nuevo nido como adultas independientes y así llegar a ser las nuevas reinas en los alrededores.
La presencia de termitas con alas significará la creación de una nueva colonia en tu propiedad con miles de estos insectos invadiendo los techos, estructuras de madera y sus derivados (como el cartón).
La colonia es subterranea y se ubica bajo la propiedad, por lo que es desde la colonia donde las termitas obreras saldrán a buscar alimento, usando a través del piso, vigas y muros, siempre en la oscuridad huyendo de la luz, creando sus propios tuneles. ¿El resultado final? Graves daños en la estructura, muebles, artículos decorativos, puertas, vigas de madera, etc.
Lo más sensato y eficaz es contar con un control de plagas termitas profesional puesto que se trata de personas que tienen conocimiento del comportamiento biológico del insecto.
Hay que tener en cuenta que los remedios caseros en ocasiones tienen el efecto contrario: en vez de eliminar la plaga de termitas la expande al poner nerviosa a la colonia, por lo que migrarán a otros lugares de la edificación.
Por eso, lo conveniente es un control de plagas de termitas en manos de un profesional que sabrá lo que tiene que hacer.
Otras cinco acciones preventivas para el control de termitas son éstas:
Revisar periódicamente las áreas exteriores de la propiedad en busca de tuneles o caminos de barro y madera dañada.
Ejecutar buenas prácticas de mantenimiento, como la reparación de tejas.
Evitar la acumulación de agua, asegurándonos de que las canaletas y otros ductos desvíen el agua de la lluvia.
Si hay sótanos, hay que procurar que estén bien ventilados y secos.
Asegurarse de que las ventanas y puertas exteriores de madera estén bien protegidas.
Las termitas aladas son un gran problema, pero con las debidas acciones preventivas más el adecuado control profesional, las tendremos bajo control.
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