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La época de frío es un detonante para que algunas plagas se introduzcan en nuestro espacio. En esta temporada, son comunes las invasiones de roedores, que aparecen sin previo aviso, dispuestos a causar destrucción y molestias si no se les detiene.
En el caso de los ratones, estos huyen del frío que hay en el exterior y buscan refugio en cualquier propiedad, ya sean casas, hoteles, restaurantes, etc. Su objetivo es mantenerse calientes, reproducirse y encontrar alimento. Esto requiere tomar medidas, ya que son animales que traen consigo los riesgos que mencionamos a continuación.
Una plaga de roedores en invierno tiene consecuencias por las que debemos controlarla lo más pronto posible con la ayuda de especialistas:
Las diferentes estructuras y demás elementos de nuestra propiedad quedan expuestos a la necesidad constante de roer que tienen estos animales. Si tenemos una plaga de roedores, no nos extrañemos si observamos daños en nuestros pisos de madera, tabiques, techos, bajantes y otras partes importantes de la casa, local o negocio.
Además, los roedores mastican tuberías plásticas causando desastres. También destruyen material de aislamiento y otros objetos para hacer sus nidos e incluso dañan los cables eléctricos, lo que pone en riego a nuestra propiedad de sufrir cortocircuitos e incendios. Ante tal amenaza, el control de plagas es indispensable.
El control de plagas de ratones en épocas de frío se hace más necesario cuando consideramos cómo resultan afectados los alimentos. Los roedores son capaces de romper sacos y cajas para poder comer los alimentos que tengamos almacenados, produciendo pérdidas de materia prima y la contaminación de productos.
Esto último ocurre, principalmente, al orinar y depositar sus heces en los alimentos, haciendo que estos dejen de ser aptos para el consumo humano. Debemos tomar en cuenta que las ratas son capaces de producir excremento entre 50 a 80 veces al día.
Si tenemos este tipo de infestación, es crucial tomar medidas de higiene adicionales cuando manipulemos o preparemos todo tipo de comida, mientras buscamos soluciones. En especial al no saber qué hacer cuando una plaga invade nuestra casa o negocio.
Hay una multitud de enfermedades que transmiten los roedores porque son portadores de parásitos, virus y bacterias. Dentro de estas tenemos la salmonelosis, que provoca infecciones intestinales, la leptospirosis y el hantavirus, que genera náuseas, vómitos, diarrea, dolores musculares y otros síntomas que ponen en riesgo nuestra vida.
Las ratas también pueden enfermarnos con meningitis debido a que algunas de ellas hospedan en su cuerpo un gusano que permanece en sus heces y si llegamos a ingerirlas cuando quedan en nuestros alimentos, podemos contagiarnos.
El control de plagas de ratones es sumamente importante para evitar los problemas que hemos mencionado y en especial porque la época de frío es una de las más riesgosas.
Para conseguirlo, necesitarás la ayuda de expertos que sepan cómo tratar una invasión de estos animales. Optar por una empresa que ofrezca un servicio de manejo integrado de plagas será clave para que puedas controlar la situación.
El uso de cebos y rodenticidas solo es seguro y eficaz cuando queda a cargo de profesionales certificados, como los técnicos que se forman en Rentokil Academy, que van a estudiar la plaga, su comportamiento y determinar la mejor estrategia para eliminarla.
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