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La verdad es que las aves suelen ser agradables a la vista e incluso bonitas de escuchar, pero la realidad es que de entre todas las especies hay algunas, como las palomas, que pueden convertirse en una verdadera molestia. La anidación de estas aves en un edificio puede suponer un riesgo para la salud o la devaluación de la propiedad.
De lo primerito que podemos ver afectado cuando especies como estas están por todos lados, son los edificios y mobiliario. Los excrementos de estos animales, altamente corrosivos, pueden destrozar edificios y monumentos. Y, por si no fuera poco, además de desagradable, con estos mismos excrementos pueden taponar canales y bajantes con su acumulación. Esto mismo se extiende a vehículos o maquinaria que se encuentre cerca, ¡qué lance la primera piedra quién no haya tenido su automoóvil muy lipio y de repente… caca de paloma!, que desastre.
Lo más importante que hay que considerar en caso de una invasión de palomas, no es tanto si estropean tu edificio o casa o si te ensucian los vidrios, es lo perjudicial que pueden resultar para la salud, ya que pueden tener plagas parasitarias tales como garrapatas, pulgas y ácaros que nos pueden afectar.
A continuación vamos a enumerar algunas de las enfermedades más frecuentes que pueden transmitir las aves, y no es que es busquemos generar pánico, per hay que tomar en serio el asunto.
Salmonella: esta bacteria se desarrolla en las zonas de acumulación de excrementos de gaviotas y palomas.
Psitacosis u ornitosis: esta infección puede ser originada por la inhalación de la bacteria de procedente de excrementos secos y plumas.
Gripe Aviar o enfermedad de Newcastle: este virus puede ser transmitido a las personas cuando están expuestas a excrementos de palomas infectadas.
Escherichia coli: puede producir enfermedades como gastroenteritis y septicemia.
Histoplasmosis y Criptococosis (infecciones fúngicas): hongos encontrados en excrementos de gaviotas.
Ácaros de aves: a menudo se encuentran en los nidos y lugares donde pernoctan.
En el mercado encontrarás muchos utensilios que quizás puedan ayudarte a alejar a las aves de una manera temporal. Si tienes las cornisas, muros o canales conquistados por las aves, de poco te van a servir unos pinchos o un cuervo falso o el ruido imitación de aves rapaces. Son más duras de combatir que eso, al final, el problema vuelve.
Para enfrentarnos a las aves, necesitamos estar bien preparados, osea, un tratamiento profesional. En Rentokil, te ofrecemos un trato personalizado y cercano, adaptándonos siempre a las necesidades de cada situación. Nosotros utilizamos diferentes sistemas como redes antipalomas, sistema electrostático y sistemas de cables Avistrand.
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