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Como expertos en control vectorial, nos hacen todo tipo de preguntas sobre los mosquitos y su comportamiento. Hemos abordado algunas de estas preguntas frecuentes, ya que pensamos que así podríamos hablar sobre algunos “lugares comunes”, realidades y mitos sobre mosquitos compartiendo algunos datos importantes sobre los mosquitos.
La llegada del calor del clima mediterráneo a menudo trae consigo un huésped no deseado: los mosquitos. Desde que tienen preferencia por ciertos grupos sanguíneos hasta concepciones erróneas sobre las funciones de los repelentes, distinguir entre los hechos y las creencias es crucial a la hora de luchar contra esta molesta plaga.
Vamos a descubrir lo que hay detrás de algunas afirmaciones categóricas sobre los mosquitos y te daremos datos esenciales sobre estos insectos.
Primer mito: Todos los mosquitos transmiten enfermedades
Aunque los mosquitos son vectores de enfermedades como la malaria, la fiebre del dengue o de virus como el del Zika o el del Nilo Occidental, no todas las especies de mosquitos son portadoras de enfermedades. Solo algunas especies son capaces de transmitir enfermedades, y su prevalencia varía entre regiones.
Sin embargo, las enfermedades transmitidas por mosquitos están aumentando en el sur de Europa, ya que las olas de calor e inundaciones han creado condiciones favorables para que especies de mosquitos invasivos portadores de enfermedades como el Aedes aegypti o el Aedes albopictus emerjan con más fuerza que nunca.
El Centro Europeo para el Control de Enfermedades ha declarado que si el Aedes aegypti i (especie de mosquito conocida por transmitir el virus del dengue, el virus de la fiebre amarilla, el virus de la chikungunya y el virus del Zika) se restituye como plaga en las regiones europeas en las que habitaba anteriormente, tendrá un impacto significativo en la salud pública.
Segundo mito: Los mosquitos prefieren ciertos tipos de sangre
A los mosquitos les atraen diversos factores como el calor corporal, el dióxido de carbono y ciertas sustancias químicas presentes en la piel. Dicho esto, las personas con sangre de tipo O son “más sabrosas” para los mosquitos.
Según un estudio, ciertas especies de mosquitos picaron casi el doble a personas con sangre de tipo O que a personas de tipo A. Pero, ¿realmente tu tipo de sangre influye al mosquito?
La realidad es que las personas expulsamos por la piel determinados químicos. Bueno, las personas secretan ciertas sustancias químicas a través de la piel. Estas sustancias químicas que produces dependerán de tu ADN, que también determina tu tipo sanguíneo.
El Dr. Jonathan Day, entomólogo especializado en mosquitos de la Universidad de Florida, afirma que algunas de estas sustancias químicas, como el ácido láctico, pueden atraer a más mosquitos. Hay investigaciones que demuestran que el Aedes aegypti ha desarrollado una notable preferencia por el olor humano, lo que les ayuda a encontrarnos y picarnos.
Tercer mito: Todos los mosquitos pican a humanos
Los mosquitos adultos se alimentan principalmente de néctar de las plantas, pero son las hembras las que necesitan una dieta con sangre para incubar y poner huevos. Por lo que buscan anfitriones, humanos y animales, para comer sangre.
Pero no todas las hembras se dirigen exclusivamente a los seres humanos. Algunas especies se alimentan principalmente de otros animales, aves o mamíferos. Las preferencias por los humanos dependen de la especie de mosquito.
Por ejemplo, el Aedes albopictus se alimenta principalmente de mamíferos. Principalmente humanos, pero también perros y gatos en el entorno doméstico, y una variedad de animales salvajes como ardillas y aves.
El Aedes aegypti se alimenta de huéspedes mamíferos pero tiene preferencia por los humanos, incluso en presencia de otros huéspedes alternativos. También se alimenta varias veces durante un ciclo gonotrófico (ciclo de alimentación, ciclo de producción de óvulos) que tiene implicaciones para la transmisión de la enfermedad. El Culex pipiens tiene una gran variedad de huéspedes, incluidos mamíferos, aves e incluso reptiles.
Cuarto mito: Los mosquitos mueren después de picar
Los mosquitos hembras, que necesitan obtener sangre para producir huevos, no mueren después de realizar el primer picotazo. Pueden llegar a picar varias veces para obtener los nutrientes necesarios y completar su ciclo reproductivo.
Ponen sus huevos cerca del agua estancada, ya sea por su propia cuenta o por grupos, dependiendo de la especie. Los huevos eclosionan al entrar en contacto con el agua, aproximadamente entre unos días y una semana después de la puesta de los huevos y es cuando entran en la etapa larval.
Las larvas de mosquitos viven en el agua y se alimentan de microorganismos y materia orgánica. Van experimentando varias mudas, aumentando su tamaño en cada una de ellas. Las larvas se convierten en pupas en la siguiente etapa, que son relativamente inactivas y no se alimentan. Durante esta etapa, se transforman en mosquitos adultos. Por lo general, las pupas permanecen cerca de la superficie del agua para respirar a través de tubos respiratorios especializados.
Tras esta etapa, los mosquitos adultos salen del agua. Los adultos recién surgidos descansan brevemente sobre la superficie del agua para reforzar y endurecer sus exoesqueletos antes de volar.
Quinto mito: Las velas con aromas de cítricos repelen eficazmente todos los mosquitos
Las velas y los aceites de citronela tienen algunas propiedades repelentes, pero su efectividad es variable. Pueden disuadir a ciertas especies de mosquitos para que no se aproximen, pero pueden no proporcionar una protección completa contra todos los tipos de mosquitos.
Estudios de 2011 sugieren que la formulación de citronela es importante para su eficacia. Cuando el producto está formulado correctamente, es tan eficaz como el DEET (el ingrediente más habitual de los repelentes de insectos. Se usa aplicándolo sobre la piel o la ropa a la hora de evitar las picaduras) y puede protegerte hasta 2 horas. Si la fórmula no es correcta, la citronela puede evaporarse rápidamente y dejarte sin protección.
Sexto mito: Los mosquitos sólo son de actividad nocturna
Aunque algunas especies son más activas en el amanecer o el anochecer, muchos mosquitos están activos durante todo el día, especialmente en zonas húmedas o con sombras. Ciertas especies también son de actividad nocturna.
Séptimo mito: Los mosquitos sólo se reproducen en agua estancada
Si bien el agua estancada es un lugar común de cría de mosquitos, estos pueden criarse en diversas fuentes de agua, incluidos estanques, lagos, marismas e incluso pequeños contenedores de agua. Eliminar el agua estancada puede reducir los focos de reproducción, pero no erradica todas las posibilidades.
Como parte de su adaptación a entornos urbanos, el Aedes aegypti aprovecha una amplia gama de contenedores artificiales (como por ejemplo jarrones, depósitos de agua y neumáticos) para criar.
También pueden subsistir en hábitats acuáticos subterráneos, como fosas sépticas, y pueden adaptarse para utilizar hábitats acuáticos de contenedores tanto en interiores como al aire libre en la misma zona. Es esta adaptabilidad lo que dificulta el control eficaz de esta especie. El Aedes albopictus también tiene la capacidad de criarse en hábitats naturales y artificiales, como neumáticos, barriles, cubos que para frenar goteras o cubetas para beber.
Diferenciar la realidad del mito sobre los mosquitos es crucial para implementar estrategias de prevención eficaces. Comprender su comportamiento, sus hábitats preferidos y su ciclo de vida puede ayudar a mitigar su impacto en la salud y el bienestar humanos. En Rentokil te ofrecemos una amplia gama de soluciones de control de mosquitos para garantizar que se siga un enfoque integrado y lograr la máxima eficacia.