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Acerca de Rentokil
La Historia De Rentokil (Antes Oliver Exterminating)
Apariencia
Tamaño real: entre 1/16 y 1/8 de pulgada
Características: pequeña; por lo general de color entre amarilla clara y roja, con pintas negras en el abdomen.
Patas: 6
Antenas: sí
Alas: no
Hábitat
Hábitos
Una de las especies de hormigas más persistentes y difíciles de controlar en la zona de San Juan y Ponce es la hormiga faraona. Debido a sus grandes colonias, que llegan a tener hasta varios millones de obreras y miles de reinas, son muy difíciles de eliminar. Son una especie invasora, superan en número a las hormigas nativas y las fuerzan a abandonar la zona. as hormigas faraonas pueden dividir sus colonias rápidamente y formar nuevas cuando se las molesta. Debido a su capacidad de dividir las colonias, pueden dispersarse con mucha rapidez en viviendas y edificaciones.
Las hormigas faraonas buscan comida todo el día y se alimentan de dulces, proteínas e insectos vivos o muertos. Los nidos a menudo están ubicados cerca de una fuente de agua, como sistemas de aspersores y unidades de enfriamiento por evaporación. Dentro de viviendas y negocios, los nidos de las hormigas faraonas por lo general están ubicados en lugares de difícil acceso cerca de fuentes de humedad como baños, cocinas, debajo de pisos o detrás de zócalos. En hospitales, hogares de ancianos e instalaciones de procesamiento de alimentos, aparecen en cocinas, zonas de lavado de ropas, cuartos de calderas y alrededor de ductos de calefacción, inodoros y tuberías. Las hormigas faraonas utilizan los cables eléctricos y las tuberías de agua para pasar de cuarto a cuarto, lo cual les permite obtener acceso a todos los espacios de la estructura.
Aunque las hormigas faraonas no pican, son portadoras y transmisoras de una serie de patógenos peligrosos para las personas y mascotas, por ejemplo, salmonela y estreptococos. Por ser tan pequeñas, pueden tener acceso a casi cualquier espacio, y por ende contaminan alimentos y las superficies en las que estos se preparan en cocinas y cafeterías mientras buscan comida. Cuando invaden hospitales y hogares de ancianos, pueden contaminar quirófanos, instrumental quirúrgico y salas de recuperación estériles. Además, los tratamientos más convencionales de control de plagas no funcionan para las hormigas faraonas. Si sospecha de una infestación de hormigas faraonas, lo recomendable es comunicarse con un exterminador de hormigas profesional.