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La Historia De Rentokil (Antes Oliver Exterminating)
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Las avispas asesinas de cigarras son una de las especies de avispas más grandes del país. Las avispas hembras suelen atacar a las cigarras en vuelo, las pican hasta que quedan paralizadas y las llevan de regreso al nido para alimentar a sus larvas. Las cigarras asesinas se encuentran en todo Estados Unidos, México y partes de Centroamérica. Estas avispas cavan hoyos o madrigueras, preferiblemente en suelos blandos, arenosos y bien drenados. Se pueden encontrar en terrenos inclinados, en macizos de flores, a lo largo de bordes de patios o aceras, así como en el jardín. Su actividad excavadora puede volverse peligrosa para las estructuras de los barrios de Puerto Rico.
Las avispas asesinas de cigarras son más activas en los meses de verano y los adultos aparecen a finales de junio y julio. Estas avispas suelen encontrarse cerca de poblaciones de cigarras. Las avispas hembras excavan en el suelo para hacer sus nidos. Después de paralizar a la cigarra, la avispa hembra enterrará a la cigarra con sus larvas en su madriguera. Con frecuencia, decenas de sus madrigueras se encuentran en prados y campos de golf. A menudo un montón de tierra rodea la entrada. La avispa macho hace guardia sobre el césped, ahuyentando a posibles depredadores.
A diferencia de otras especies de avispas, las cigarras asesinas no son muy agresivas y rara vez pican a humanos o mascotas, a menos que se les moleste. Los machos son agresivos y territoriales, pero no poseen aguijón. Una picadura de avispa asesina de cigarras puede ser dolorosa y su veneno puede provocar una reacción alérgica en algunas personas. Los asesinos de cigarras pueden ser una molestia si se encuentran en su propiedad. Las avispas hembras cavan madrigueras bastante grandes, creando un desastre bastante grande cerca de las plantas y la vegetación. El comportamiento excavador de esta avispa puede dañar las raíces de las plantas y hacer que algunas estructuras, como pasarelas y caminos, sean inestables.