Este verano hemos tenido conocimiento por diversos medios de comunicación de la confirmación del primer caso de enfermedad de Chikungunya transmitida por mosquito tigre en España.
Hasta ahora solo se habían reportado casos importados, normalmente de turistas que habían contraído la infección durante sus estancias en zonas geográficas donde esta enfermedad es endémica, pero en esta ocasión, el European Centre for Disease Prevention and Control (ECDE) ha confirmado plenamente un caso autóctono.
Se trata de un hombre de aproximadamente 60 años que viajó a Francia procedente de Gandía y que a día de hoy ya está recuperado. Manifestó los síntomas en Francia, pero dado el periodo de incubación que tiene esta enfermedad (entre 4 y 8 días según la OMS), el origen sólo pudo ser su ciudad de procedencia. La presencia de A. albopictus (mosquito tigre) en esa zona de la Comunidad Valenciana está confirmada.
Como ya hemos comentado en alguna ocasión la presencia de mosquito tigre en Europa se ha visto incrementada en los últimos años debido a su gran capacidad de adaptación. Aunque no es capaz de volar grandes distancias, se traslada de una región a otra introduciéndose en medios de transporte. De hecho, hemos visto también este verano como biólogos buscaban específicamente mosquitos tigre en vehículos en la Comunidad de Cataluña.
De manera endémica la enfermedad aparece en África, Asia y el subcontinente indio. En los últimos decenios los vectores de la enfermedad se han propagado a Europa y a América. En 2007 se notificó por vez primera la transmisión de la enfermedad en Europa, en un brote localizado en el nordeste de Italia. Desde entonces se han registrado brotes en Francia, Croacia y ahora España.
Pero, ¿qué es la fiebre o enfermedad de Chikungunya? Según la Organización Mundial de la Salud, y a manera de resumen, podemos decir que es una enfermedad vírica (alfavirus) transmitida al ser humano por mosquitos infectados. Se describió por primera vez en Tanzania.
Además de fiebre y dolores articulares, produce otros síntomas, tales como dolores musculares y de cabeza, náuseas, cansancio y erupciones cutáneas. Puede confundirse con el Dengue, por lo que la confirmación de la enfermedad debe hacerse mediante pruebas específicas de laboratorio.
El tratamiento se centra en el alivio de los síntomas. De momento no hay vacuna preventiva. Los afectados se suelen recuperar, pero los dolores articulares pueden durar años. Algunos afectados pueden pasar la enfermedad sin darse cuenta realmente que la han padecido.
Un factor de riesgo importante es la proximidad de las viviendas a lugares de cría de los mosquitos, por lo que la prevención y control debe centrarse en la reducción del número de depósitos de agua que puedan servir de criadero de los mosquitos. Para ello es necesario informar tanto a los responsables municipales como a los propios ciudadanos.
Como tratamiento, en zonas endémicas, se pueden aplicar tratamientos insecticidas para eliminar adultos y también larvicidas en el agua para matar las fases inmaduras (larvas). Si se viaja a zonas comprometidas se recomienda no exponer la piel en la medida de lo posible, aplicarse repelentes y dormir con mosquiteras en ventanas.
Comentar finalmente que la propia OMS anima a los países a crear y mantener estructuras que les permitan detectar y confirmar casos, atender a los pacientes apropiadamente y poner en práctica las estrategias de comunicación social oportunas para reducir la presencia de los mosquitos vectores.
Fuentes:
ABC.es (28/08/2015)
Centro de Prensa de la Organización Mundial de la Salud
Actualización sobre este artículo.
En el día de ayer se ha tenido noticia que el caso de Gandía ha resultado ser un falso positivo. La Consejería de Sanidad de la Comunitat Valenciana lo ha confirmado según informa “El País”.
Al parecer se han realizado un segundo y tercer análisis serológico y se ha determinado que en realidad el paciente afectado no sufrió la enfermedad de Chikungunya sino que padeció un proceso con síntomas muy similares.
Por tanto, todos los casos notificados hasta el momento en España resultan ser importados.