- ¡Cómo, joya!
- ¿Yo, un humilde escarabajo convertido en piedra preciosa?
¡Pero si de eso ya sabían mucho los egipcios, hombre! La imaginación del ser humano es infinita y su creatividad apasionante.
Pensando sobre qué cosas podía hablaros en el post de hoy, he caído en la cuenta de que se acerca San Vatentín. ¡Oh qué bello es el amor! Pero tranquilos que, será la próxima semana cuando entremos de lleno a investigar sobre la pasión entre insectos, si es que la hay, jejeje.
Hoy nos centraremos en aquellas cosas bonitas, elegantes y originales que los humanos somos capaces de crear a partir de la riqueza que nos ofrecen los artrópodos.
Como os comentaba al principio los egipcios fueron los primeros en plasmar a modo de joya lo que ellos llamaban Escarabeos: escarabajos.
Fueron los grandes precursores al inmortalizar al escarabajo como amuleto. Observaron su potencial y dados ellos a otorgar a los animales cualidades humanas, decidieron adoptarlo como bicho sagrado.
Para ellos era el símbolo de la vida y el poder, mientras estaban vivitos y coleando volcaron en él la representación del sol naciente, vamos lo que viene siendo la resurrección. Eso sí primero tenían que cruzar en la llamada Barca Solar, lo que los griegos llamaban la Laguna Estigia o el río del inframundo.
Adoraban tanto a este insecto que lo tallaban en sus tumbas pero también, los artesanos de la época utilizaron materiales como la estealita, el basalto, el granito y piedras preciosas como el lapislázuli, la amatista o la cornalina. Cómo no, el oro fue otro de los elementos usados para la fabricación de joyas.
Este tipo de joyas han perdurado hasta nuestros días. Quizá sea uno de los insectos más utilizados para crear auténticas bellezas en forma de colgantes, anillos o broches. Pero también se pueden utilizar como sellos y esculturas.
Como curiosidad os diré que en México se utilizan, a día de hoy, y en ocasiones con críticas de parte de algunas asociaciones ecologistas, como joyas vivas. Sí, ¡vivas!
Se trata de una tradición que parte de una leyenda llamada: La Princesa y el Escarabajo. Una adaptación de la historia a lo Romeo y Julieta pero de una princesa maya que estando prometida a un príncipe se enamoró de un guerrero y su padre ordenó su muerte. Ante los lamentos de la princesa, el rey le perdonó la vida a cambio de convertirlo en escarabajo.
La princesa, compuesta, sin novio, pero con un bonito escarabajo pelotero en su poder, no se le ocurrió otra idea mejor que adornarlo con piedras preciosas y llevarlo colgado de su cuello. De esta manera estarían juntos para siempre.
El caso es que en algunos mercados del interior del país se pueden adquirir esta joyas que podéis ver en este enlace Escarabajos del Yucatán .
Raro, verdad, ¡A mí, desde luego, me van más los insectos de mentirijilla! No me veo yo con un insecto andando por mi pecho. Oinch… que cosas.
Lo cierto es que hay numerosas opciones de decoración y ornamentación basadas en los bichitos. Por ejemplo, hay quién es capaz de recrear a los escarabajos a partir de capsulas de una conocida marca de café rápido, y grandes firmas de joyería que realizan verdaderas obras de arte para lucirlas.
Broches con forma de mariposas, arañas, o libélulas; anillos llenos de brillantes, menos dañinos que la picadura de un mosquito, cadenas, brazaletes e incluso piezas de ropa. Se puede hacer de todo inspirándose en nuestros queridos artrópodos.
Los diseñadores no dejan pasar una y crean tendencia con sus creaciones incluso las bautizan con nombres bíblicos como Las Siete Plagas
En Rentokil tenemos una idea menos “preciosa” de los insectos. Ya sabéis que estas criaturitas, aún siendo en ocasiones de una gran belleza visual, como en el caso del llamado Escarabajo Joya en realidad son capaces de originar la peor de las plagas.
Nosotros os damos todas las soluciones posibles a cualquier tipo de invasión a través de nuestra web.
Eso sí de ornamentación también sabemos lo nuestro a través de nuestra división Ambius podéis solicitar cuantos ornamentos florales y de decoración de interiores y exteriores os apetezca. Incluso podéis aportar vuestras propias ideas y un equipo de diseñadores estudiará vuestro proyecto.
¡Anímate, no es que valga lo mismo que un coleóptero de oro, pero quedan muy bonitas!
Interesante artículo, la verdad es que es curiosa la diferencia de culturas y las mitologías de cada una.