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Los insectos de productos almacenados a menudo son encontrados en productos destinados al consumo humano. Con el fin de controlar estos insectos de forma adecuada, los alimentos deben ser retirados o destruidos concienzudamente para no propagar la plaga más todavía, o tratarse de forma que no ponga en riesgo su uso final.
Los servicios profesionales de Rentokil le ayudarán a identificar y eliminar los insectos de productos almacenados de forma eficaz, garantizando la mínima interrupción para el funcionamiento de su negocio, además de asegurar que los tratamientos cumplen con la legislación correspondiente en materia de salud y seguridad.
Nuestros procesos de gestión se centran en tres aspectos principales para garantizar la solución más eficaz a su problema de plagas. Estos servicios cubren las áreas de la prevención, la inspección y el control.
Bloquear el acceso de las plagas a estos productos almacenados debe ser la principal defensa contra estos insectos. Por tanto uno de los aspectos que más hay que tener en cuenta es la higiene y el saneamiento, que se deben mantener siempre al más alto nivel, pero asegurando una especial atención durante los meses más calurosos, puesto que las altas temperaturas pueden acelerar el desarrollo de las plagas de insectos. Algunas recomendaciones que deben llevarse a cabo son las siguientes:.
Las plagas de productos almacenados pueden limitarse a un área pequeño, como una bolsa o un palet, sin embargo si no se detecta y trata a tiempo puede propagarse rápidamente por todo el recinto, por lo que conviene realizar inspecciones regulares y monitorizar las zonas más propensas a albergar una plaga. Esta monitorización periódica es parte integral de la gestión de plagas de insectos de Rentokil.
Inspeccionar los materiales y productos entrantes - realizando las inspecciones en una zona alejada del área principal de almacenamiento para evitar posibles contagios. En caso de sospecha los materiales deben ser rechazados inmediatamente y devueltos al proveedor.
Colocar los dispositivos de monitorización - se deben usar trampas y cebos para monitorizar y localizar información sobre las plagas dentro de las instalaciones. También proporcionan información sobre la severidad de la plaga y el tipo de especie invasora, así como de la eficacia del tratamiento.
Usar trampas de embudo - estas trampas de feromonas atraen a los insectos, y una vez que están dentro quedan atrapados sin posibilidad de salir. Además, las trampas actúan como monitorizadores de la actividad de insectos, cuando los insectos son capturados, se puede identificar la especie fácilmente para así diseñar el tratamiento más adecuado.
Además de las inspecciones regulares realizadas por Rentokil, también se recomienda que el personal de la empresa realicen monitoresos de rutina para garantizar el diagnóstico precoz de cualquier problema de plagas.
Si se confirma la presencia de plagas, el tratamiento deberá realizarse ya sea en una pequeña zona aislada si la plaga está localizada y controlada, o incluso en todo el recinto de sus instalaciones si se constata que la plaga se ha esparcido por todo su negocio o su hogar.
Muy importante: No hay ningun producto autorizado para su uso en Industria Alimentaria que se pueda aplicar en forma de aerosol, es decir no se pueden realizar ni termonebulizaciones ni nieblas frias.
Evitar la contaminación de los productos es la prioridad número uno, por tanto nuestros servicios incluyen lo siguiente:
Pulverización controlada - aplicaciones puntuales de biocida en zonas muy concretas y localizadas. El éxito de este tratamiento depende del adecuado acceso a las zonas afectadas y la limpieza de de todo el area.
Tratamiento térmico - el tratamiento por calor resulta letal para todas las fases del insecto, huevo, larva, pupa y adulto. Se pueden aislar distintas zonas tanto de almacenaje como de producción (incluida maquinaria), es necesario monitorizar constantemente la temperatura en disitintas áreas para garantizar el éxito del tratamiento.
Fumigación - es el empleo de sustancias gaseosas (fumigantes) que son tóxicos, y por tanto eliminan los insectos de productos almacenados en cualquier estadio de su desarrollo en el que se encuentren. Deben realizarse en recintos a prueba de gases para contener el producto y evitar su esparcimiento. Las zonas expuestas y las anexas tienen que estar libres de personas durante todo el tratamiento de fumigación. El personal técnico de aplicación tiene que contar con los equipos necesarios de protección personal, incluyendo máscaras antigas.
Llame a Rentokil al 900 907 132 si desea tratamientos especializados o necesita asesoramiento para identificar una plaga de productos almacenados.
Consejos para prevenir y eliminar las plagas